La detención del sospechoso, un ciudadano argentino mayor de edad, fue llevada a cabo por detectives del Departamento Unidad de Investigación Antiterrorista (DUIA) de la Superintendencia de Investigaciones Federales de la PFA.

Esto se enmarca en la investigación por «intimidación pública» que está bajo la jurisdicción del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal 12, dirigido por el juez federal Ariel Lijo y la Secretaria 23, a cargo de Paola Yanina Kohen.

Según los informantes, el acusado se sospecha que no solo estuvo detrás de las amenazas de ayer, sino también de una serie de mensajes intimidatorios que, a principios de este mes, fueron enviados a las cuentas de correo electrónico oficiales de las embajadas de Estados Unidos, Israel, Canadá, Emiratos Árabes Unidos, Irán y la Delegación de la Unión Europea.

Estos mensajes comunes contenían amenazas de bomba dirigidas a las sedes diplomáticas y amenazas contra los funcionarios de las embajadas.

Durante el allanamiento, se incautaron pruebas relevantes para la investigación, que incluyeron teléfonos móviles, portátiles, unidades flash y otros dispositivos de almacenamiento para su análisis.

Las amenazas por correo electrónico se hicieron públicas cuando la sede diplomática de Israel en el barrio porteño de Monserrat, sobre la Avenida de Mayo al 700, recibió una amenaza de bomba por correo electrónico.

El tráfico se interrumpió para llevar a cabo las investigaciones de seguridad. Posteriormente, se descubrió una amenaza similar en la Embajada de Estados Unidos, la cual fue informada por el jefe de seguridad de la sede a la Comisaría Vecinal 14C. Después de inspecciones realizadas por el escuadrón antibombas de la PFA en ambas embajadas, se determinó que no había artefactos explosivos.