El presidente argentino, Javier Milei, participó en la Cumbre de Líderes del G20, donde expresó una visión crítica sobre el rol del Estado en la economía y abogó por el libre mercado como herramienta para combatir la pobreza y el hambre.

En su intervención durante la primera sesión, titulada «Inclusión social y lucha contra el hambre y la pobreza», Milei cuestionó las políticas intervencionistas, argumentando que históricamente han resultado en fracaso. «Cada vez que un Estado tuvo una presencia del 100% en la economía, el resultado fue el éxodo de la población, la fuga de capital y millones de muertes por hambre, frío o crimen», afirmó.

El mandatario argentino insistió en que los derechos fundamentales, como la propiedad, la libertad y la vida, son esenciales para alcanzar prosperidad y crecimiento económico. En este sentido, criticó la planificación centralizada y el dirigismo estatal, que según él, perpetúan los problemas sociales en lugar de resolverlos.

Milei también destacó los logros del capitalismo de libre mercado, señalando que ha sacado de la pobreza extrema al 90% de la población global y duplicado la expectativa de vida. «Todo esto fue logrado por el sector privado, no por órdenes de burócratas estatales», aseguró.

El presidente cerró su discurso reafirmando su compromiso con políticas económicas que reduzcan la intervención estatal y fomenten la libertad económica. «Nuestra administración no defenderá mayor presión fiscal ni propuestas de desarrollo sostenible que frenen el progreso de los países más pobres», concluyó.

La participación de Milei en el G20 refuerza su postura liberal y promete generar debate entre los líderes globales sobre las estrategias para enfrentar los desafíos económicos y sociales del mundo actual.