Asesinaron a una socia del narco Alvarado

Ayer al mediodía, los miembros de una familia que hacían el asado en su casa de Liniers y Gálvez escucharon a una mujer que gritaba desesperada “no, no, no” y, a continuación, una seguidilla de tiros. La mujer era Valeria Cecilia Nasca, pareja de Jorge Antonio Benegas, quien fuera un miembro clave de la estructura del empresario narco Esteban Alvarado. “No parecían ser disparados de ametralladora, sino que sonaron espaciados, pum, pum, pum. Como si le apuntaran con cada disparo”, contó un vecino. La mujer de 45 años murió en el lugar, junto a la pequeña puerta del galpón donde tenía una empresa de transporte con su esposo. En el lugar se hallaron once vainas servidas 9 milímetros.
Nasca y Benegas habían sido condenados como miembros de la banda de Alvarado. La mujer a tres años de prisión condicional y el hombre a cinco años de cárcel, de donde salió poco tiempo atrás. Sobre los homicidas, al cierre de esta edición sólo se sabía que habían llegado en un Ford Focus gris con vidrios polarizados que luego fue hallado en unos monoblocks cercanos. Tampoco había una hipótesis certera sobre quién pudo haberlo instigado, por lo que la investigación en manos de la fiscal Marisol Fabbro no descartaba nada.
Con este crimen son tres las personas condenadas como miembros de la banda de Alvarado asesinadas en los últimos tiempos.
Benegas y su pareja tenían una empresa de transporte en Liniers al 2600. Según relató el hombre a los policías que se acercaron al lugar luego del primer llamado al 911, él había pactado a través de Facebook un encuentro con presuntos interesados en comprar un trailer para camión.
Sobre las 11 escucharon que golpeaban el portón del galpón y la mujer fue a atender. Cuando Nasca abrió una puerta más pequeña Benegas la escuchó gritar: “No, no, no”. Acto seguido oyó los disparos. Corrió hasta la puerta y la halló tendida en el suelo con varios balazos.
Vecinos dijeron a la policía que el homicida iba en junto a otras personas en un Ford Focus gris. Pasado el mediodía la policía halló en el estacionamiento de un monoblock de Teniente Agnetta al 2100 un Ford Focus gris dominio LAL-262 sin ocupantes. El auto tenía pedido de secuestro por haber sido robado el 24 de febrero en Eva Perón al 9000.
El galpón está en la ochava de Gálvez y 27 de Febrero, desde donde se extiende unos 30 metros por cada calle. Ayer podían verse en su interior dos camiones Scania y un Mercedes Benz estacionados. Según los vecinos hace al menos un año que allí funciona esa empresa de transporte que Benegas fundó hace un tiempo y al parecer seguía trabajando con su esposa. En la cuadra de Liniers hay dos galpones similares y en ninguna esquina se aprecian cámaras de vigilancia.
Compañera
Allegados y antiguos miembros de la banda de Esteban Alvarado definen a Valeria como una mujer muy activa y compañera de Benegas en los negocios que encararon. E indicaron que la pareja había tenido un gran crecimiento económico cuando él era la mano derecha de Alvarado.
Benegas y Nasca habían sido imputados como miembros de la asociación ilícita que le atribuyeron comandar a Alvarado, un entramado de empresas que aportaban logística para el desarrollo de actividades económicas financiadas por la venta de droga. En octubre de 2021 fueron condenados mediante juicios abreviados.
Considerado uno de los miembros más importantes de esa estructura, Benegas aceptó las acusaciones por miembro de asociación ilícita y lavado de activos por las que lo condenaron a cinco años de cárcel y una multa superior a los 60 millones de pesos. Por su parte, la mujer firmó una pena de tres años de ejecución condicional por esos mismos delitos, con una multa que superaba los 50 millones. Entre otras cosas, le habían atribuido su participación en una maniobra tendiente a ocultar deliberadamente la calidad de propietario que Alvarado tenía de la vivienda familiar ubicada en Fuerza Aérea al 2300 de Funes.
Fuentes judiciales indicaron que la multa no había sido pagada en su totalidad y que en los últimos tiempos se habían rematado varios bienes de la pareja. En ese marco, para los próximos días había una audiencia prevista en la cual se pensaba determinar el saldo de la multa y acordar una forma de pago.
En cuanto a los posibles móviles del crimen hasta anoche no había nada que pudiera ir más allá del terreno de las conjeturas. La hipótesis de una presunta venganza de Alvarado por algo que pudiera haber declarado en su contra Nasca al acordar su condena no tenía asidero, en principio, ya que los voceros consultados señalaron que la mujer no ofició como testigo tal como había sido el mecánico Carlos Argüelles.
Tampoco había elementos que pudieran conectar a rivales de Alvarado con este ataque tal como se comprobara con el asesinato de Rodrigo Sánchez, mano derecha del narco, por cuyo crimen fue condenado la semana pasada como instigador Jonatan Brezik, estrechamente vinculado con Los Monos.
Por ello es que en este contexto la fiscal evaluó que aún es muy prematuro aventurar una hipótesis y remarcó los dichos de Benegas, quien aseguró que no tenía problemas con nadie.
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