Rafaela: Una proteccionista de animales habría sufrido una golpiza y amenazas de muerte por parte de una mujer

En diálogo con MINUTO RAFAELA Fiorella Cabral y Jazmin Mazzoni, proteccionistas de animales de la ciudad, nos informaron sobre una situación que habría vivido una colega suya. Carolina fue víctima por parte de una mujer que, según Rescatistas Independientes, la atosigó, amenazó y violentó sin razones justificables.

Este hecho habría comenzado luego de que la agresora recurriera a los rescatistas de la ciudad para poder “ayudar” a un perro que su propia madre tenía muy mal cuidado y en estado deplorable. Según nos informan, el problema es que decidiría consultar a un hombre que, haciéndose pasar por rescatista, se aprovecharía de la bondad de la gente para su propio beneficio; una persona con problemas graves de adicción que estafaría a las personas por redes sociales y luego se quedaría con el dinero de las donaciones.

Este «señor» no solo hubiera engañado a la agresora, sino que también manipulado inculpando a las rescatistas de Protección Animal de Rafaela, quienes lidian con estas situaciones desde hace años. Lamentablemente, esta mujer creyendo esta versión, acudió a la clínica veterinaria donde habían atendido al perro de su madre. Allí, se comenta que hubo agresiones físicas a la veterinaria hasta que los presentes la echaron del lugar.

Luego de esto, se supone que fue a esperar frente a la casa de una de las proteccionistas pendientes al caso, Carolina, y la golpeó de manera excesiva y con mucha violencia. Nos comentan que Caro estaba acompañada de su hija, quien es menor de edad, y con un cachorrito rescatado en brazos, mientras esta mujer la agredía sin considerar absolutamente nada. Fio se lamenta y nos cuenta que su compañera «es lo más dulce y amable que existe en el mundo.»

Luego comentan que se pudo chequear mediante facturas y comprobantes de pago que el perrito fue atendido gracias a las donaciones que llegaron directamente a la veterinaria, que la mujer no habría colaborado económicamente con los gastos y que, según los rescatistas, «quería la plata para ella.»

El antes y el después de una perrita que fue rescatada de una persona que la utilizaba para servir.

Las preguntas que se harían las rescatistas son ¿Y el Estado? ¿El municipio? ¿Las autoridades o fiscalía?
Es evidente que después de toda esta situación se realizaron las denuncias correspondientes y, como suele suceder, las rescatistas nos comentan que la respuesta fue una increíble demostración del poco apoyo que reciben por parte de las autoridades y el Estado. Resulta que en Fiscalía les habrían explicado que no pueden poner una perimetral a la agresora pero que «si se vuelve a acercar, va a la cárcel.» Lo que se preguntan las proteccionistas es ¿Cuánto más? ¿Qué tanto se debe acercar si ya agredió físicamente y amenazó de muerte?

Lo más tenebroso es que la mujer habría expresado en la comisaría que «no iba a dejar de buscar a la proteccionista hasta matarla por robarle plata.»
Es irónico que las personas que protegen a los animales se sientan desprotegidas, que incluso haciéndose cargo de una problemática social estén lidiando con tanta violencia y abusos.

¿Qué podemos esperar de entidades que permiten que una persona con problemas de adicción tenga las posibilidades de estafar a tantas personas y estar impune? ¿Qué podemos esperar de una fiscalía que ante amenazas de muerte estaría haciendo oídos sordos?

Cabe aclarar que la gran mayoría de los proteccionistas son personas que realizan su trabajo sin ningún beneficio económico, que ayudan a los animales de corazón y se responsabilizan de una problemática a la cual muchos le hacen caso omiso. Son personas que además de participar en estas asociaciones tienen familia, estudian, trabajan y lidian con problemas personales como todos.

Por esto es importante como sociedad valorar, ayudar y defender a las personas que, con un corazón amable, hacen lo mismo por los animales de nuestra Rafaela.

Fotos de animales rescatados:

crackdetudo.com

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